Antes de empezar a detallar cada una de las fases del plan de marketing digital diremos que se trata de una estructura cíclica en la que cada etapa se va retroalimentando por cada fase anterior.
Además, en cualquier plan de marketing, una vez llegada a la última fase de medición de resultados, y gracias a ese carácter cíclico, nos permitirá poder reanudar este proceso replanteando de nuevo la primera fase y así poder ir corrigiendo tanto los posibles errores cometidos, como introduciendo nuevas variables que nos permita que nuestro plan de marketing digital nos lleve a esos resultados positivos planteados al arranque del mismo.
Como ya dijimos en otra publicación donde tratábamos qué es un plan de marketing digital, cada plan puede variar en su número de etapas dependiendo de diferentes variables (tamaño de la empresa, nivel de volumen de negocio, dimensión del nicho de mercado donde se englobe la empresa, etc.), pero por lo general, la estructura básica de un plan de marketing digital tendrá las siguientes fases:
- Análisis de la situación.
- Objetivos establecidos.
- Estrategias a emplear para conseguir dichos objetivos.
- Plan de acción.
- Medición de resultados.
ANÁLISIS DE LA SITUACIÓN
Esta etapa nos ayudará a conocer en qué situación (digital) nos encontramos actualmente, donde tendremos que llevar a cabo un análisis DAFO para estudiar la situación digital interna y externa de la empresa.
También, como en cualquier DAFO, identificaremos cuáles serán las debilidades, amenazas, fortalezas y debilidades de nuestra empresa ante una nueva estrategia digital que queramos implantar.
Cuando hablamos del análisis digital interno de la empresa nos estamos refiriendo a llevar a cabo una auditoria que se centre en los siguientes siete puntos que van a componer nuestra estructura digital, como son:
- Página Web.
- Blog.
- Como estamos situados respecto al SEO en google.
- Redes sociales.
- Estudio de nuestro email marketing (Si lo hay).
- Publicidad digital.
- Analítica web.
Del mismo modo, en el análisis digital externo tendremos que centrarnos especialmente en estudiar las siguientes variables:
- Estudio del mercado donde estamos operando.
- Investigar lo que hace nuestra competencia (Tanto errores cometidos, como beneficios obtenidos en el ámbito digital).
Con estos estudios tendremos una visión general de cómo podríamos actuar y qué estrategias plantear para alcanzar los objetivos marcados en este plan de marketing.
OBJETIVOS
Cuando entramos en esta etapa lo más importante, y a la vez lo más difícil, debido a que nuestro ímpetu como empresarios siempre es llegar a lo más alto en el menor tiempo posible, será establecer objetivos claros, reales y medibles.
En este punto, yo siempre aconsejo que nos vayamos marcando microobjetivos que serán los que nos ayuden a ir implantando las bases sólidas de nuestra red digital empresarial, y poquito a poco, gracias a este carácter cíclico del que hablamos anteriormente del plan de marketing digital, ir haciendo variaciones en lo que no ha funcionado e ir aumentando el riesgo respecto a nuevos objetivos superiores.
A la hora de establecer que objetivos marcar, debemos diferenciar dos tipos:
- Objetivos generales: Que pueden ir desde desarrollar un buen branding, aumentar el tráfico a nuestra página web, posicionamiento en buscadores, fidelización de clientes, etc.
- Objetivos específicos: Aumentar el porcentaje de tráfico a nuestra web, disminuir el porcentaje de abandono en nuestra web, aumentar la tasa de apertura de nuestro email marketing, etc., siempre estableciendo periodos que vayan como mínimo entre los seis y doces meses.
ESTABLECER ESTRATEGIAS
En este punto vamos a establecer las diferentes estrategias que tendrán que ir siempre alineadas a los objetivos marcados. Estas estrategias también nos vendrán marcadas por variables que afectan directamente a la empresa tales como: los recursos humanos, recursos económicos, recursos tecnológicos, etc.
Una vez marcadas las estrategias a seguir, también es necesario dejar bien claro cuáles van a ser los procesos que nos van a permitir poder llegar a desarrollar de una manera óptima cada una de las estrategias por separado.
PLAN DE ACCIÓN
Este plan debe de estar compuesto por cada una de las acciones que se van a llevar a cabo en cada estrategia que nos permita alcanzar los objetivos marcados.
En este plan de acción deberemos dejar bien claros los siguientes aspectos: qué, cuándo, cómo, dónde y quién va a llevar a cabo cada una de las acciones marcadas en la anterior etapa.
Personalmente, yo siempre recomiendo que un plan estratégico vaya marcado para un mínimo de seis meses, pero de una manera preferible, para un periodo de un año.
MEDICIÓN
Muchas de las empresas que desarrollan de una manera personal e improvisada un plan de marketing digital, esta fase se la pasan por alto sin darle realmente la importancia que tiene.
Cualquier plan de marketing tiene que ir unido a una etapa de medición de resultados, que será la que nos marque si estamos haciendo las cosas bien o mal, o si estamos acertando con las estrategias marcadas para así ir cambiando aquellas variables que no nos estén ayudando a optimizar este plan estratégico.
Una vez que se marca un plan de acción también debemos de establecer cuáles van a ser nuestras KPIS principales que nos van a ir marcando lo positivo o negativo de cada una de acciones aplicadas por separados.
Como mínimo, mensualmente, debemos de analizar dichas métricas para obtener información tanto sobre las mediciones de nuestras estrategias como el retorno sobre la inversión que estamos realizando (ROI).
En resumen, debemos de medir para replantear aquellas acciones que no funcionan, y repetir e incluso reforzar aquellos procesos que están siendo efectivos.
Para terminar con este post, quiero que te quedes con lo más importante, y es que cada etapa es imprescindible, que la posterior no es nada sin la anterior, de ahí el carácter cíclico del que te hablaba al empezar esta publicación.
Y sobretodo, no tendremos un buen plan de marketing digital sino llevamos a cabo una buena medición.